Intercambio de experiencias, amigos, viajes, valentía y el conocimiento de una Colombia más profunda. Años después de aplicar a una beca y obtenerla, mi vida ha pasado por procesos valiosos de transformación y trabajo en sociedad

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Soy Tiany Gamarra, Comunicadora Social cartagenera. Últimamente ese título ha sido derrocado y suelo presentarme como profesora así, sin más, y con todo el orgullo. Quisiera relatar las razones por las cuales mi ejercicio profesional me ha dado un nuevo título (con todo lo que implica ser profesora en nuestro país), enlazando esto con el  popular dicho “una cosa que lleva a la otra”. 

Fui becaria de la Fundación Bancolombia con su programa de Becas Sueños de Paz cuando cursaba quinto semestre, cumplía con los requisitos que ustedes ya han de conocer, pero estuve a punto de no aceptar algo que sería un punto de giro en mi vida por miedo a adquirir una deuda. Así es, el miedo a comprometer mi futuro financiero por poco hace que perdiera lo que ahora soy.  

Me convencí de tomar la beca porque quería estudiar inglés. Saqué cuentas y con la suma de la manutención me las podía arreglar para pagar las clases, así que postulé y apenas obtuve el sí, me inscribí en un programa privado e intensivo de inglés como segunda lengua.  Al cabo de dos años ya manejaba el idioma. Al tener este plus, apliqué a una pasantía con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y fui admitida. Ya se podrán imaginar lo mucho que me agradecí de haber tomado la decisión de la beca, pues ese año pude viajar y vivir en un hermoso municipio de Antioquia, conocer muchas personas y tener el primer acercamiento con el tema de la educación desde el rol docente.  

Al finalizar la carrera, supe que mi razón de ser debía estar orientada a ayudar a las personas así como yo había sido ayudada. Me había gustado ser profesora durante mi pasantía, pero no tenía muy claro por dónde iniciar. Allí apareció Enseña por Colombia.  

Enseña es una ONG que, en pro de llevar educación de calidad a escuelas altamente vulnerables, recluta profesionales de distintas áreas y los asigna a un colegio en calidad de docentes durante dos años. Leí, pregunté y con un poco de nervios postulé, pues había estudiado Comunicación Social y temía no ser lo que buscaban. Este programa, dentro de sus prioridades, busca llevar a los colegios profesores capacitados en Inglés y áreas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). ¿Adivinen quién había aprendido inglés?  

Después de un filtro riguroso y exigente, finalmente integré el grupo de los 90 nuevos profesores de la cohorte 2018 de Enseña por Colombia. Fui muy feliz al saber que el haber estudiado inglés me estaba dando esta gran oportunidad, que estoy segura no hubiese obtenido de otro modo, pues mi asignación fue para ser profe de inglés. 

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 Así fue como desde entonces y para siempre pase de ser sencillamente Comunicadora Social, a ser “Teacher”, “Seño teacher”, “Profe”, “Proe” o “Seño”. Desde que fui profesora de primaria en el colegio Rosedal en Cartagena y profe de bachillerato en el colegio La provincia de Carepa, Antioquia, siento que me debo a la sociedad como profesora y agente de transformación social.  

 No terminaría nunca de relatarles lo importante que esto ha sido para mi vida, la de mi familia y la de mis estudiantes. No podría terminar de poner en palabras lo que ha significado conocer más mi país y los retos de su sistema educativo. Sería loco pensar que el trabajo ya está hecho ahora que culminé los dos años dentro del programa, el reto sigue y busco seguir trabajando en la educación porque es desde donde se construye una mejor sociedad.  

Tengo la responsabilidad de decirles que los miedos se van esfumando. Antes de haber terminado mi primer año como profesora pude pagar la condonación de la beca, que terminó siendo nada en comparación a todo lo que gané al obtenerla. Quisiera pensar que mis estudiantes algún día podrán tener estas oportunidades.  

No me cabe duda y sé que no fue casualidad, les digo que una cosa me llevó a la otra. La beca fue el puente para estudiar inglés y para finalizar con éxito la formación profesional. Esto a su vez, permitió que fuera candidata idónea para un programa exigente como el de Enseña Por Colombia, que entre otras cosas cuenta con el apoyo de Fundación Bancolombia al tener becarios de su Fundación dentro del programa.  

Hace poco tuve la oportunidad de conocer al equipo que hace estos sueños posibles en las instalaciones de la Fundación Bancolombia en Medellín, gratitud a ellos y ellas, gratitud a ustedes por leerme y gratitud a mis estudiantes que me inspiran a mirar en retrospectiva y darme cuenta que cada decisión, aun con miedo, ha valido la pena.  

 

Tiany Gamarra